"Gracias a la diversificación hemos multiplicado por dos la actividad de la empresa en los últimos 15 años"
Reconocido como uno de los directivos de referencia en el tejido empresarial aragonés, Joaquín Portillo es Director General de Adiego Hermanos desde hace casi dos décadas. La compañía, que recientemente ha celebrado su 60 aniversario, ha experimentado un importante crecimiento desde la entrada de Portillo, siendo actualmente una insignia en ámbitos como la industria química, la gestión del agua, la agricultura y la sostenibilidad.
Conocemos más a Joaquín Portillo en este «Vermú de Redacción» que estuvo conducido por Berta Lorente, vicepresidenta de Cámara de Comercio de Zaragoza.
Joaquín Portillo: impacto familiar y cómo la química se coló en su vida
Reconocido por sus valores como persona, Joaquín Portillo ha desarrollado a lo largo de sus más de cuatro décadas como profesional una trayectoria directiva de gran éxito. Poniendo en el foco, además de los valores, elementos como la base técnica, la capacidad de adaptación y la importancia de rodearse de un buen equipo, Portillo ha logrado hacer de Adiego Hermanos una compañía diversificada e internacional.
No obstante, hace retrospectiva y recuerda sus comienzos. Si algo destaca del actual Director General de Adiego Hermanos es su componente humano. Portillo tiene a la familia como centro de su vida, y los que lo han rodeado siempre han subrayado su carácter empático y generoso. Al respecto, señala, «siempre he tratado de tener mi puerta abierta para el resto, como empresario pero también como persona».
Nacido en Zaragoza, aunque de ascendencia canaria, nunca pudo conocer a su padre, quien era militar y falleció en acto de servicio. La figura materna siempre ha sido muy importante en su vida, al igual que la de su abuela y sus hermanas, inculcándole valores importantes como el del esfuerzo y el trabajo constante.
No obstante, el contacto anticipado de Joaquín Portillo con la química, que ahora forma parte de su día a día, vino por parte de su tío. Con poco más de 10 años, éste le regalo un kit con el que empezar a experimentar. Pese a familiarizarse con esta disciplina y «realizar alguna travesura», su formación académica no se enfocó en la química, sino en la Ingeniería Industrial, siendo parte de la primera promoción de la Universidad de Zaragoza en este campo.
Adiego Hermanos, 60 aniversario y un crecimiento más allá de nuestra fronteras
Casi dos décadas han pasado desde que Joaquín Portillo recibió la llamada que lo llevó a ser Director General de Adiego Hermanos. La empresa familiar, que ya contaba con cuarenta años de vida, lo tenía claro. Portillo lo recuerda: «queremos que vengas para que profesionalices la compañía». Un objetivo claro, pero en el que no se podía prescindir de cuestiones como la tradición y los valores que impregnaban la organización.
Contactado por la propia familia, Portillo subraya que «la confianza plena en el equipo directivo se notó desde el primer momento», sin olvidarse del gran compromiso y el buen feeling que siempre ha existido a lo largo de los años. Es así como Adiego Hermanos ha conseguido celebrar su 60 aniversario, cumplido en 2024, con cifras de récord y una presencia global que nunca había experimentado esta empresa zaragozana.
Y es que, como señala Portillo, «aunque el sector químico tenga una mala fama totalmente injustificada, la química está presente en todas las facetas de nuestra vida». Algo que desde Adiego representan a la perfección mediante su impacto positivo en proyectos de procesos industriales, limpieza, tratamiento del agua, agricultura, entre otros.
Esta ampliación de servicios ha sido clave en el crecimiento de la compañía. Actualmente, cuentan con cuatro grandes áreas diferenciadas, y Portillo afirma que «gracias a esto hemos multiplicado por dos la actividad de la empresa en los últimos 15 años». En este sentido, el desarrollo de Adiego Hermanos se ha estructurado en torno a claves como la sostenibilidad, la diversificación y la economía circular. Una hoja de ruta, no cabe duda, acertada.
Como directivo, durante este proceso de crecimiento, Portillo subraya el hecho de haber sido «un buen artesano». Consciente de la importancia de manejar bien el día a día, apunta varios imprescindibles: rodearse de un buen equipo humano, dominar la situación del mercado y trabajar las tendencias y la innovación. Claves que, respaldadas por unos resultados sostenidos a lo largo de los años, parecen ser más que precisas.
Formato patrocinado por Grupo Hierros Alfonso.