Pikolin y Flex colaboran en la implementación de (SCRAP), un sistema colectivo de responsabilidad ampliada del productor destinado a gestionar de manera efectiva los desechos generados por los colchones
De esta manera, tanto Pikolin y Flex toman medidas proactivas al anticiparse a las futuras regulaciones previstas en la Ley 7/2022 de Residuos y Suelos Contaminados, enfocada en la promoción de una Economía Circular.
Pikolin y Flex: comprometidas con la sostenibilidad medioambiental
Pikolin y Flex han unido fuerzas en la creación de un sistema colectivo de responsabilidad ampliada del productor, denominado SCRAP, con el propósito de gestionar de manera eficaz los residuos derivados de los colchones. En este sentido, Pikolin y Flex, empresas líderes en la industria del descanso, reconocen la importancia de asumir su responsabilidad en la búsqueda de prácticas más sostenibles.
Como parte de este compromiso, han establecido una entidad sin ánimo de lucro que tiene como objetivo impulsar la circularidad de los productos en el sector del descanso, anticipándose a las futuras regulaciones contempladas en la Ley 7/2022 de Residuos y Suelos Contaminados, en el marco de una Economía Circular.
Además, tanto Pikolin como Flex ya ofrecen un servicio de logística inversa para recoger los colchones usados al entregar uno nuevo. A pesar de que la iniciativa proviene de Pikolin y Flex, SCRAP ha sido presentado ante el resto de las empresas del sector con el objetivo de que la iniciativa promueva prácticas cada vez más sostenibles en la industria del descanso.
Este paso es de gran relevancia debido a la durabilidad de los colchones, que oscila entre 10 y 15 años. La duración se debe en gran parte a que aproximadamente el 80% de los consumidores da un uso prolongado en segundas residencias y habitaciones de invitados. Esto convierte al colchón en uno de los productos de consumo más sostenibles.
Pikolin obtuvo la certificación residuo cero de Aenor en 2021